31 de mayo de 1410

Hoy 31 de mayo se celebran muchas fechas. Alguna de estas efemérides es muy, pero que muy interesante. Por ejemplo, los 112 años del atentado contra Alfonso XIII en Madrid; los 424 años del fallecimiento del Tintoretto; los 56 años de la detención y secuestro en Argentina de Adolf Eichmann; los 116 años del fin de la Guerra de los Bóers... 

Pero por encima de todo, me interesa la conmemoración de los 608 años del fallecimiento de Martín el Humano, rey de Aragón. ¿Por qué? Porque la historia podría haber sido muy diferente...

Nacido en Gerona en 1359 y fallecido en Barcelona en 1410 (lo acabo de decir), era el segundo hijo de Pedro IV de Aragón y de Leonor de Sicilia. Llegó a ser rey de Aragón, de Valencia, de Mallorca, de Córcega, de Cerdeña, de Sicilia y Conde de Barcelona (me tendrán que convencer a mi de que ha existido el título de rey de Barcelona...). 

Cuando falleció en 1410 (tercera vez, por si no os había quedado claro...) ninguno de sus hijos varones vivía. Se abría un grave problema sucesorio. Ese problema se iba a dilucidar con el examen de los derechos de los candidatos, estableciendo las reglas de examen y los participantes en la Concordia de Alcañiz (1412). Había seis pretendientes:

- Fadrique de Luna, nieto de Martín I el humano (hijo bastardo de Martín el joven).

- Luis de Anjou, sobrino-nieto de Martín I el Humano (nieto de su hermano, Juan I de Aragón).

- Jaime II de Urgel, que era a la vez sobrino segundo (hijo de su primo Pedro) y cuñado, por estar casado con Isabel, única hermana de Martín que estaba viva en aquellas fechas.

- Alfonso I de Gandía (primo del padre de Martín, Pedro IV el Ceremonioso). 

- Juan de Prades, hermano del anterior y por tanto con el mismo grado de parentesco.

- Fernando de Antequera, sobrino de Martín el Humano. 

Este último era el que tenía el grado de parentesco más próximo al rey muerto, y recibía los derechos al trono de su madre, Leonor, hija de Pedro IV el Ceremonioso y por tanto hermana de Martín I el Humano. 

La cuestión es que Fernando de Antequera era hijo también de Juan I de Castilla, con lo que su elección suponía la novedad en la Península de que la misma dinastía, los Trastamara, gobernaran en las dos grandes coronas de la época: la castellana y la aragonesa. Y eso abrió la puerta a que, tras el matrimonio en 1469 de Fernando II de Aragón con Isabel I de Castilla, la sucesión permitiera a un solo gobernante aglutinar casi todo el gobierno de la península, al heredar tanto posesiones castellanas como aragonesas: Carlos I de España (bueno, eso de España... de las Españas sería más correcto). Pero eso es otra historia, y sucederá más de un siglo después.

Pero... ¿qué habría pasado si los compromisarios citados en Caspe en 1412 hubieran elegido a otro pretendiente? Pues que el recorrido de la historia no se parecería en nada a lo que hemos heredado. Puede que Fernando de Antequera hubiera reaccionado con una acción militar combatiendo por Aragón, donde tenía un fuerte apoyo... Puede que Aragón y Castilla nunca se hubieran unido... Puede que en función de sus filias y fobias los distintos reinos de la Corona de Aragón se hubieran separado... ¡Quién sabe!

Pero es un bonito reto para los amantes de la historia-ficción. 

Otra cosa: seguro que la moción de censura que se está celebrando hoy tendría unos contenidos bien distintos... ¡o no!