Hace unos días vi un fragmento de un programa muy interesante: Supervivientes. Sabía de qué iba y, a pesar del indudable interés, nunca me había detenido en disfrutar con él. Error. Se aprende mucho. Son personajes muy estimulantes. De hecho, el fragmento que vi tenía relación directa con la cultura.
La escena es: tres personajes subidos a una estructura de madera que se adentra unos metros en el mar. Es una especie de palafito. Cada personaje tiene ante sí una plataforma formada por listones de madera cada vez más estrechos. Por turno, los concursantes reciben preguntas. Si fallan, tienen que adelantarse en la plataforma, con la dificultad que entraña el guardar el equilibrio en un trozo de madera cada vez menor. Así, hasta que no lo resisten, y caen.
Y ahora lo bueno. Las preguntas, y las respuestas.
- Pregunta: ¿Quién es el famoso pintor autor de El Hombre de Vitrubio?
- Respuesta: Goya.
- Pregunta: ¿Cuál es el nombre propio del famoso pintor Dalí?
- Respuesta: Leonardo.
- Pregunta: ¿Dónde está la Casa Blanca?
- Respuesta: En Nueva York.
Biba la kultura. Estos son los personajes que se meten la pasta en el bolsillo, haciendo alarde de cerebro mazorral, espíritu paleto y estilo garrulo (o gárrulo, que también es posible). Estos son los personajes que incitan a nuestros alumnos a dejarse la piel estudiando... ¿no?
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