El 8 de marzo, festividad de San Juan de Dios (patrón de los trabajadores de la sanidad y de los bomberos), se celebra desde hace años el Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Me parece bien, creo que nos parece bien a todos. De forma general se considera que el hecho que motivó la elección de la fecha fue la huelga realizada por las trabajadoras de la fábrica Cotton de Nueva York, que terminó en un incendio intencionado el día 8 de marzo de 1908, provocando la muerte de 129 trabajadoras. Hay quien reproduce los acontecimientos (lugar, circunstancia e incluso número de víctimas), pero retrotrayéndose a 1857. Otros localizan el origen en el primer Woman's Day, que tuvo lugar en un teatro de Chicago el 8 de marzo de 1908.
Sea cual sea el origen, no conviene olvidar que la mujer ha sido siempre trabajadora; que sus aportaciones a la historia de la humanidad son incontables, aunque casi siempre anónimas; que no se puede medir con sueldos el valor de lo que hacen.
Feliz día a todas las mujeres que trabajan, en casa o fuera de ella.
2 comentarios:
La mujer, ese gran desconocido.
Un mundo forjado por la igualdad entre sexos, por eso se lucha en días como estos.
Pero, ¿por qué celebrar este dato en un único dia? Una mujer trabajadora, como su propio nombre indica, trabaja a diario, combatiendo por unos derechos, que nos valgan a todos por igual.
"Vivir entre mujeres es como un desierto, no sabes cuando encontrarás agua"
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